miércoles, 28 de enero de 2009

Volvió Terragno


"A mi juicio, la Argentina carece hoy de un proyecto de mediano y largo plazo. Es necesario que lo tenga el gobierno. Y es necesario, también, que quienes estamos en la vereda de enfrente tengamos un proyecto unificado.
Aspiro a que se forme –más que un frente de oposición— un frente de proposición , que marque un rumbo. Y quiero aportar, a este efecto, las enseñanzas que me dejó la Alianza, que tuvo dos fases: una extraordinariamente exitosa y otra por demás decepcionante.
Cuando en 1995, como presidente de la UCR, yo propuse que se formara una Alianza sin esperar a 1999, casi no hubo dirigente que estuviera de acuerdo, ni en el radicalismo ni en el Frepaso; y 100% de los comentaristas políticos dijeron que la Alianza no se iba a formar nunca. Finalmente la Alianza se formó en 1997, ganó las elecciones legislativas de ese año y llegó al poder en 1999. Pero allí comenzó el drama: el Dr. De la Rúa decidió continuar con la política ya agotada del 1 a 1, que no podía llevar sino a lo que llevó.
Cualquiera que hubiese presidido el país, si se hubiese obstinado en mantener a rajatabla el 1 a 1, habría caído en medio de una hecatombe. Aquella experiencia me indica hoy dos cosas: (1) La alternativa al oficialismo debe ser construida con urgencia; no se puede esperar al 2011. (2) El frente tiene que tener un proyecto muy definido. Hay que acordar que se haría en caso de llegar al gobierno. Es sobre estos temas que he empezado a hablar con dirigentes como Julio Cobos, Elisa Carrió y la conducción de la UCR, entre otros”.
Las declaraciones de Rodolfo Héctor Terragno precedieron un trabajo ya avanzado de contactos con todos los opositores del oficialismo. El ex Jefe de Gabinete de De la Rúa adelantó que la receta que necesitamos es esencialmente "de reparto". Índicó una serie de prioridades: a) Definir la coparticipación para afirmar el federalismo. Reformular el sistema impositivo, que es "de peaje", según el sanmartiniano: pagan ricos y pobres, sin distinción; b) Repartir con equidad ("Sudamérica es territorio de gran injusticia distributiva", remarcó) sin desalentar la inversión en crecimiento ("para tener lo qué compartir").
Destacó la necesidad de una dirigencia carismática y creible. Apuntó a dos méritos del kirchnerismo ("que no alcanzan para caracterizar a un buen gobierno", acentuó): la recomposición de la Corte Suprema y la firmeza en la negociación de la deuda externa.
Remarcó que la realidad electoral se define con dos polos, por lo que debe armarse una oposición unificada para vencer a los K.

1 comentario:

Rosa Opina dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con el artículo, que, aunque incompleto acerca de las acciones indispensables en un proyecto serio y de todo lo que perdimos del
´89 a esta realidad.
La mayoría de los radicales de mi provincia- Santiago del Estero- están "atados" y enmudecidos (por propia voluntad, algunos, y por carecer de espacios para el dicenso, otros) ante el gobierno nacional por la discrecionalidad en el manejo de los recursos y el temor a represalias que afecten la llegada de esos dineros. Sería bueno publicar en este sitio cálculos de lo que se lleva cada jurisdicción: nacional, provincial y municipal destacando la incostiucionalidad del reparto.
Rosa Llugdar
rellugdar@arnet.com.ar
Santiago del Estero